Durante la crisis del COVID-19 la actuación del Banco Central Europeo (BCE) ha sido clave para estabilizar los mercados financieros y garantizar unas condiciones de financiación holgadas para los gobiernos, las empresas y las familias en todos los países del área del euro.
Las medidas del BCE se han centrado en sus programas de compras de activos (APP y PEPP) y en las operaciones de financiación a largo plazo (LTRO, TLTRO – serie III - y PELTRO).
El 12 de marzo de 2020, el BCE anunció una mejora en las condiciones de las operaciones TLTRO III, 12 operaciones adicionales de LTRO con vencimiento en junio de 2020 y compras netas de activos adicionales bajo el marco de la APP por valor de 120 mm € hasta finales de 2020.
A lo largo del mismo mes, el BCE continuó anunciando medidas de apoyo a la economía como operaciones semanales de financiación en dólares, ajustes en los criterios de garantía y, en especial, un nuevo programa de compras de activos excepcional para combatir el impacto del pandemia del COVID-19 en la economía (PEPP) con una dotación inicial de 750 mil millones de euros.
En abril de 2020, se anunciaron nuevas relajaciones en los criterios de garantías, una mejora adicional en las condiciones de las operaciones de TLTRO III durante el periodo de crisis y 7 operaciones excepcionales de PELTRO con vencimiento en el tercer trimestre de 2021.
Posteriormente, el BCE incrementó la dotación total del PEPP, así como su extensión en el tiempo y el mantenimiento de la reinversión del principal adquirido.