Por qué son fiables las estadísticas (oficiales)

Javier Jareño (Estadística), Juan Mª Peñalosa (Director General Adjunto)

En la actual era de la información, la disponibilidad de datos es abrumadora. Identificar la información fiable es un reto al que nos enfrentamos hoy como ciudadanos. Las estadísticas oficiales son una garantía de información en la que se puede confiar.

La «exuberancia informativa» actual, resultado de la revolución digital, conduce a que gran cantidad de información alcance a todo tipo de personas, en muchas ocasiones con independencia de sus intereses. Facilitar el acceso a la información es beneficioso. Pero hoy disponemos de mucha información, que proviene de multitud de fuentes. A menudo es difícil identificar cuál es realmente útil y, además, fiable. La información y los datos estadísticos también se han multiplicado. Las estadísticas tienen un gran valor porque nos permiten medir el mundo que nos rodea en todas sus manifestaciones, comprenderlo mejor y guiar nuestras decisiones como consumidores, empresarios, votantes o ciudadanos. Pero, con su apariencia de rigor, también pueden favorecer la desinformación. ¿Cuáles son las claves para navegar con confianza en este mar de datos e información? ¿Por qué puede usted fiarse de las estadísticas oficiales?

Una parte de la información estadística que nos llega carece de una «denominación de origen»: se desconoce cómo y dónde se han obtenido los datos, incluso quién los ha elaborado. A veces las estadísticas se basan en unas pocas observaciones; en otras ocasiones simplemente se han replicado datos que, de buena fe, se toman como fiables. Las nuevas tecnologías, como la IA generativaAbre en nueva ventana, ofrecen múltiples oportunidades, pero también pueden dar lugar a la difusión de datos no contrastados o a “alucinaciones”Abre en nueva ventana. También se dan casos en los que no existe buena fe y que contribuyen al creciente fenómeno de la desinformaciónAbre en nueva ventana.

Todos sabemos que hay información que distorsiona la realidad o que, incluso, es falsa. Pero, en general, no somos totalmente conscientes de la importancia de la información estadística y de que esta provenga de una fuente fiable. Esto puede verse en diversos EurobarómetrosAbre en nueva ventana (véase el esquema 1). Esta actitud de la ciudadanía española no difiere del conjunto de la UE, salvo en que percibe una mayor cantidad de información falsa.

Esquema 1
LA ACTITUD DE LOS CIUDADANOS ESPAÑOLES FRENTE A LAS ESTADÍSTICAS Y LA INFORMACIÓN FALSA
LA ACTITUD DE LOS CIUDADANOS ESPAÑOLES FRENTE A LAS ESTADÍSTICAS Y LA INFORMACIÓN FALSA

FUENTE: Eurobarómetro Abre en nueva ventana(Flash 536 y Standard 100, Otoño 2023).

¿Qué se debe pedir a un dato o a una estadística para ser fiable?

En síntesis, una estadística fiable debería ser elaborada:

  • de forma cuidadosa;
  • por alguien que no tenga ningún conflicto de intereses con el fenómeno que se quiere medir;
  • bajo unas reglas establecidas y publicadas de antemano;
  • y difundida de una forma transparente.

Las estadísticas oficiales cumplen con estos requisitos: siguen unos principios metodológicos severos, idénticos a los que establece la comunidad internacional y que pueden ser verificados. Los funcionarios que las elaboran son independientes, neutrales, profesionales. En el caso español, se encuentran en el Instituto Nacional de EstadísticaAbre en nueva ventana, en el Banco de España y en otras instituciones públicas.

Las estadísticas del Banco de España cumplen los requisitos más exigentes de calidad, lo que respalda su fiabilidad

Las estadísticas del Banco de España siguen los principios más exigentes. Son los establecidos en el “Compromiso público del SEBC en relación con las estadísticas europeas”Abre en nueva ventana, en línea con los definidos en el marco de la Unión Europea y de Naciones Unidas. La adhesión del Banco de España a dicho compromiso público viene acompañada por la exigencia y verificación de las instituciones internacionales.

La información de calidad necesita tiempo de elaboración

Una alta exigencia de calidad en las fuentes y en los procedimientos refuerza su calidad, rigor y fiabilidad, aunque tiene implicaciones en términos de agilidad:

  • Menor inmediatez en la publicación de resultados: garantizar que la información de las fuentes estadísticas es lo más completa posible, comprobar si esta es correcta y aplicar métodos rigurosos en su procesamiento requieren cierto tiempo, lo que dilata la difusión de resultados.
  • Tiempo para adaptarse a nuevos fenómenos: no es fácil en estos casos disponer de fuentes de información fiables, con una metodología consensuada internacionalmente, lo que dilata la incorporación de estadísticas sobre los fenómenos de reciente aparición.

La información es cada vez más temprana y detallada

Para recortar los tiempos existentes entre la observación de un fenómeno y su publicación, los que elaboramos las estadísticas estamos realizando esfuerzos en disponer de las fuentes de forma más temprana y en agilizar los procesos de tratamiento de los datos. Para algunas variables se ofrece información de «avance», esto es, información estadística que utiliza aquellas fuentes de datos disponibles con más prontitud, completadas con estimaciones, y que ofrecen una buena aproximación al dato final. A esto contribuyen también las nuevas técnicas de tratamiento de la información (la «ciencia de datos»Abre en nueva ventana), que, además, mejoran la accesibilidad y la visualización de las estadísticas.

Estamos poniendo el foco en agilizar la publicación de estadísticas y en reaccionar rápidamente a los nuevos fenómenos

La crisis financiera de 2008 o la pandemia provocada por el COVID-19 han sido toques de atención sobre la necesidad de reaccionar con más celeridad a la aparición de nuevos fenómenos. Acciones como la Data Gaps InitiativeAbre en nueva ventana, lanzada por el G-20, han puesto el foco sobre la capacidad de reacción rápida y ya se han registrado algunos avances. La mayor disponibilidad de datos granulares (muy detallados) permite elaborar con mayor rapidez algunas estadísticas, como las financieras.

Por otro lado, se está impulsando la elaboración de «estadísticas experimentales»Abre en nueva ventana. Estas estadísticas se difunden incluso antes de disponer de fuentes totalmente fiables y de metodologías consolidadas, con el fin de tener información sobre los nuevos fenómenos lo más temprano posible.

El Banco de España quiere estadísticas fiables, útiles y accesibles

La elaboración de las estadísticas en el Banco de España está sujeta a todas las consideraciones positivas anteriores, y también a las limitaciones de la estadística oficial. Es gratificante observar que, de acuerdo con la última encuesta de satisfacciónAbre en nueva ventana (véase el esquema 2), los usuarios de nuestras estadísticas tienen una confianza muy alta en ellas.

Esquema 2
LOS USUARIOS ESTÁN SATISFECHOS CON LAS ESTADÍSTICAS DEL BANCO DE ESPAÑA

RESULTADOS DE LA ENCUESTA DE SATISFACCIÓN A LOS USUARIOS DE LAS ESTADÍSTICAS DEL BANCO DE ESPAÑA

Fuente: Banco de España. Encuesta de satisfacción de los usuarios de estadísticas 2023Abre en nueva ventana.

La estadística oficial es un servicio público y, como tal, debe servir a la sociedad. Por eso el Banco de España quiere hacer sus estadísticas más accesibles y más comprensibles para el público menos experto. En ese camino estamos avanzando.

Javier Jareño
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  • Estadística
Juan Mª Peñalosa
Juan Mª Peñalosa
  • Director General Adjunto
  • Estrategia, Personas y Datos
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