A contracorriente: el acuerdo comercial Unión Europea-Mercosur
La Unión Europea ha intensificado en los últimos años el diálogo comercial con América Latina en respuesta a los cambios geopolíticos. Uno de los resultados más concretos es el acuerdo con Mercosur que, si se ratifica, reforzará la integración económica entre ambas regiones.
13/03/2025
En la última década, los riesgos de fragmentación económica y comercial han aumentado, debido principalmente a los cambios geopolíticos. Y con la llegada de la nueva administración estadounidense, tales riesgos se han incrementado. El acuerdo comercial alcanzado entre la Unión Europea (UE) y Mercosur
—al que pertenecen Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay— en diciembre de 2024 va contra esta tendencia y supone un hito importante para la integración económica entre ambos lados del Atlántico. ¿En qué consiste el acuerdo? ¿Qué supondrá para el comercio entre ambas regiones, en caso de que sea finalmente ratificado?
La UE ha intensificado el diálogo con América Latina desde hace unos años. El objetivo es lograr una mayor diversificación del comercio y más autonomía estratégica, a través del fortalecimiento de los lazos entre las dos áreas. En los últimos dos años, la UE ha actualizado los acuerdos comerciales ya en vigor con México y Chile. Además, ha alcanzado un nuevo e importante acuerdo con los países de Mercosur. Pero, para que sea efectivo, el acuerdo tiene que ser ratificado por ambos lados, lo que llevará aún algún tiempo.
¿SABÍA QUE…?
La política comercial es competencia exclusiva de la UE. Pero, en los últimos años, los acuerdos comerciales incluyen temas que van más allá de la política comercial, como medio ambiente, energía o transporte, entre otros, que son competencias compartidas entre la UE y sus estados miembros. Por ello, en la UE la ratificación definitiva de los acuerdos comerciales de este tipo es un proceso largo y complejo, al requerir una aprobación en dos niveles (europeo y nacional):
-La parte del acuerdo que trata temas estrictamente comerciales (rebaja de aranceles, modificaciones de algunas barreras no arancelarias) necesita la ratificación del Consejo de la UE (con el apoyo de al menos 15 de los 27 estados miembros que representen el 65% de la población de la UE) y del Parlamento Europeo.
-Por su parte, los estados miembros deben aprobar, en sus parlamentos nacionales, las partes del acuerdo que afectan a sus competencias.
Por parte de Mercosur, el acuerdo comercial estaría ratificado tras la aprobación parlamentaria de todos los países miembros.
No obstante, en los últimos acuerdos comerciales, la parte comercial ha entrado en vigor, de modo provisional, tras la aprobación a nivel europeo y del otro país o región. En el caso de Canadá este proceso llevó 11 meses.
De entrar en vigor, el Acuerdo UE-Mercosur crearía un área de libre comercio de más de 770 millones de personas, que representa un cuarto del PIB mundial. La UE tendría así acuerdos comerciales con todos los países de América Latina excepto Bolivia, Cuba y Venezuela.
El acuerdo facilitaría el comercio entre dos regiones con fuertes vínculos económicos. Como se observa en el gráfico 1, la UE supone más del 10% del comercio de Mercosur. Aunque Mercosur solo representa el 2% del comercio exterior de la UE con otros países, hay sectores concretos y estratégicos, como el de alimentos y las materias primas, en los que supone el 13% y el 14%, respectivamente, de las importaciones comunitarias.
Grafico 1
COMERCIO ENTRE LA UNIÓN EUROPEA Y MERCOSUR EN 2023
Comercio de la UE con Mercosur y el resto de América Latina
Comercio de Mercosur con la UE y otras áreas
FUENTE: UN COMTRADE, Banco de España.
De entrar en vigor, el Acuerdo UE-Mercosur crearía un mercado de más de 770 millones de personas y la UE tendría acuerdos comerciales con casi todos los países de América Latina
Además, a través de este acuerdo, Mercosur puede ayudar a la Unión Europea a reducir los crecientes riesgos económicos, derivados de factores geopolíticos, gracias a una mayor diversificación de las cadenas de valor globales, especialmente de aquellas que incluyan materias primas críticas para la transición digital y para una economía menos contaminante.
¿Qué efecto tendría el acuerdo sobre el comercio de las dos regiones?
En la actualidad, las relaciones comerciales bilaterales entre la UE y Mercosur se rigen por la regla del arancel de la Nación Más Favorecida de la Organización Mundial del Comercio. Este tipo de arancel lo establece cada área o país a un tipo único para cada producto importado y se aplica a todos los países con los que no rigen acuerdos comerciales.
En 2023, el promedio de los aranceles aplicados – que depende tanto del arancel que cada país fija para cada producto como de los tipos de productos que se importan – por la UE a Mercosur fue del 5%, mientras que el aplicado por Mercosur a la UE fue más del doble, en torno al 11%.
Los aranceles para productos específicos pueden ser mucho mayores. Así, Mercosur impone a las importaciones europeas de algunos alimentos y manufacturas aranceles que oscilan entre un 14% y un 35%. Entre los alimentos se encuentran los productos lácteos, chocolate y confitería, licores o vinos; entre las manufacturas, repuestos para automóviles, maquinaria, productos químicos, farmacéuticos, textiles y calzado.
El acuerdo UE-Mercosur supone la eliminación gradual de los aranceles de más del 90% de los productos intercambiados entre ambas regiones. La mayoría de los productos se liberalizaría en un plazo de hasta diez años.
El acuerdo reduciría los aranceles del 90% de los productos y es uno de los más ambiciosos en términos de estándares laborales y sostenibilidad medioambiental
Para algunos productos, como por ejemplo las carnes de vacuno y de ave, o el arroz, los aranceles no se eliminarían por completo. Solo se reducirían para una cantidad limitada de importaciones, llamada “cuota”, fijada en una cuantía cercana a las que se comercian con los aranceles actuales. Los aranceles no se modificarían para las cantidades importadas que excedieran esa cuota. En estos casos, la liberalización podría tardar hasta quince años.
También reduciría las barreras no arancelarias en diferentes áreas clave: si bien se mantendrían las normas sanitarias, fitosanitarias, y técnicas, el acuerdo garantizaría que respondan al objetivo de proteger a los consumidores, es decir, que no se utilicen para restringir el comercio internacional de forma injustificada. Además, facilitaría el acceso a las licitaciones públicas y el comercio de servicios.
El acuerdo también prevé la protección de más de 350 indicaciones geográficas europeas y 220 de Mercosur, productos alimenticios cuyas cualidades están específicamente vinculadas a la zona de producción.
El acuerdo es uno de los más ambiciosos a nivel global en términos de estándares laborales y de sostenibilidad medioambiental. El acuerdo asegura el respeto a los derechos laborales según las recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo e incluye obligaciones específicas para combatir el cambio climático y la deforestación, siguiendo el Acuerdo de París.
¿Qué potencial tiene el acuerdo UE-Mercosur en términos de comercio para ambas regiones? Varios estudios de nuestros investigadores (como este o este otro) calculan que el comercio entre ambas áreas aumentaría en más de un tercio a largo plazo. Como se observa en el gráfico 2, esto supone que el comercio total de Mercosur crecería entre un 5% y un 13%, mientras que en la UE el incremento no llegaría al 1%. Para España, podría aumentar más del doble que para la media europea. Estas disparidades se deben a la diferente importancia relativa de cada región en el comercio de la otra, que mostrábamos en el gráfico 1.
Grafico 2
IMPACTO DEL ACUERDO UE-MERCOSUR SOBRE EL COMERCIO BILATERAL
Para la Unión Europea
Para Mercosur
FUENTE: UN COMTRADE, Banco de España.
NOTAS: El escenario base sería el que no considera el acueerdo comercial. El rango y la mediana se han calculado a partir de los resultados de las simulaciones realizadas en los trabajos de Timini y Viani (2022) y de Berganza, Campos, Estevadeordal Talvi, y Timini (2024). El promedio de las dos areas, UE y Mercosur, es la media simple de los efectos calculados para cada pais en cada área.
No obstante, el impacto económico potencial puede ser mucho mayor para ambas regiones. Si bien las estimaciones no tienen en cuenta posibles efectos adversos a corto plazo, como la pérdida de empleo en algunos de los sectores más expuestos a una mayor competencia internacional, tampoco consideran otros posibles beneficios de largo plazo, como el acceso a tecnologías avanzadas, el fortalecimiento de las cadenas globales de valor, y una mayor inversión.
NOTA: Las opiniones de esta entrada de blog son responsabilidad de los autores y no necesariamente coinciden con las del Banco de España o el Eurosistema.
