La construcción de la Unión Europea

La Unión Europea (UEAbre en nueva ventana).es una asociación económica y política única en su género y compuesta por 28 países europeos que abarcan juntos gran parte del continente.

Antecedentes

Tras la II Guerra Mundial, las naciones europeas se propusieron firmemente que nunca más se produjera semejante destrucción en el continente, desunido por enfrentamientos nacionales históricos.

Un primer paso fue la firma del Tratado del Benelux, en 1944, que entró en vigor en 1948 y por el que Bélgica, Luxemburgo y los Países Bajos crearon el primer mercado europeo en el que no había fronteras interiores.

El 9 de mayo de 1950, Robert Schuman, uno de los padres fundadores de la unidad europea, propone la creación de una organización europea para controlar la producción de carbón y acero, materias primas indispensables para la reconstrucción del continente.

El nacimiento de las Comunidades Europeas

La cooperación económica europea la inician, siguiendo las líneas generales de la propuesta de Robert Schuman, seis Estados (Bélgica, Alemania, Francia, Italia, Luxemburgo y Países Bajos), que firman en 1951 un acuerdo para gestionar de forma común sus industrias pesadas. Nace la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA)Abre en nueva ventana.

Ante el éxito de la iniciativa, los mencionados países deciden poco después integrar otros sectores de sus economías, como la agricultura, y avanzar en la eliminación de las barreras comerciales. Un definitivo avance hacia la constitución de un mercado común, en el que fuera posible la libre circulación de mercancías, personas, servicios y capitales, lo constituyó, en marzo de 1957, la firma de los Tratados de Roma, que dan lugar a la creación de la Comunidad Económica Europea (CEE)Abre en nueva ventana en 1958 y a la Comunidad Europea de la Energía Atómica (CEEA o Euratom)Abre en nueva ventana.

En 1965 se crean el Consejo y la Comisión Europea, instituciones únicas para las tres Comunidades Europeas: CECA, CEE y CEEA.

El Acta Única Europea

En 1968 los miembros de la CEE habían suprimido ya los derechos de aduana, pero las diferentes legislaciones nacionales siguieron constituyendo una traba para el libre intercambio económico. En 1987, entra en vigor el Acta Única EuropeaAbre en nueva ventana la primera gran reforma de los tratados vigentes, que fija como objetivo la creación de un mercado único no más tarde del 1 de enero de 1993. Durante los años ochenta, este proceso concentrará gran parte de las energías europeas.

El Tratado de Maastricht

En 1992 se da un paso definitivo en el proceso de integración con la aprobación del Tratado sobre la Unión Europea o Tratado de Maastricht Abre en nueva ventana, que establece una nueva estructura institucional: se crea la Unión Europea sobre la base de las tres comunidades europeas existentes: la CECA, la Comunidad Europea (CE, denominada hasta entonces CEE) y la CEEA. El proceso de integración política -el pilar institucional se completa con otros dos pilares: el de la política exterior y de seguridad común y el de cooperación policial y judicial- avanza en paralelo al de integración económica. El Tratado de Maastricht da luz verde a la creación de una Unión Económica y Monetaria (UEM), con un mandato muy claro para el establecimiento de la moneda única.

Los últimos acuerdos

El Tratado de AmsterdamAbre en nueva ventana de 1997 y el Tratado de NizaAbre en nueva ventana de 2001 han permitido ampliar las competencias de la Unión y avanzar en la renuncia por parte de los Estados miembros a parcelas significativas de su soberanía en aras de unas reglas comunes y unas normas armonizadas de actuación.

El Tratado de LisboaAbre en nueva ventana de 2007 respondió a la necesidad de mejorar diversos aspectos de funcionamiento de la Unión Europea y vino a dotar a la UE de un marco jurídico y operativo más sólido y coherente, capaz de responder mejor a las expectativas de los ciudadanos.